Recientemente, iniciamos una serie de entrevistas sobre cómo evolucionamos globalmente a lo largo de nuestros 55 años. Comenzamos esta incursión en la historia de nuestras operaciones sudamericanas con una entrevista especial con Pablo Jedwabny, director General de Vicunha Argentina. Y ahora llegó la hora de conocer más sobre el inicio de nuestra jornada en Ecuador.

Para hablar sobre el desarrollo de nuestro negocio en el país, entrevistamos a Eduardo Veintimilla, director Industrial de Vicunha Ecuador. Trabaja desde hace 34 años en la fábrica que se llamaba “La Internacional” hasta 2007, año en el que la adquirió Vicunha.

A pesar de estar recuperándose de una cirugía en la columna cervical, recibió cordialmente al área de Comunicación para una charla que fue muy rica. Le agradecemos a Eduardo el poder estar con nosotros y el darnos información valiosa para rememorar nuestra historia en el mundo.

Lee el texto de la entrevista completa y mira el vídeo con partes en destaque de la conversación.

Comunicación de Vicunha: ¿Cómo empieza la participación de Vicunha en Ecuador?

Eduardo Veintimilla: La empresa que hoy es Vicunha ya existía antes. Se llamaba “La Internacional” y Vicunha la compró en 2007. Antes de eso, yo ya trabajaba en la fábrica, que fue fundada en 1921. O sea, era una empresa textil centenaria y que tiene mucha historia. En esa transición, Ricardo Steinbruch me pidió que continuara en la empresa. Y ahora ya hace más de quince años que formo parte del equipo de Vicunha.

¿Qué evolucionó desde la adquisición de la empresa en 2007?

Vicunha invirtió mucho en los años 2009 y 2010, lo que multiplicó cuatro veces la capacidad de producción de la fábrica… Pasamos de 400 mil metros mensuales a 1,6 millones aproximadamente, teniendo que adaptarnos a máquinas nuevas. En el pasado, era una empresa pequeña si la comparamos con el tamaño actual de Vicunha. Y cuando Vicunha incorporó la industria en la que trabajamos, pasamos a formar parte de un grupo mucho más grande. Hoy, Ecuador ya forma parte de un 9% de los negocios de Vicunha. Continuamos siendo un hermano pequeño dentro de un grupo que fue haciéndose multinacional.

“Pasamos a hablar una única lengua dentro de un sistema de gestión. Portuñol, portugués o español, da igual”

¿Y cómo fue esa integración de Vicunha con la fábrica que ya existía en Ecuador?

Pasamos por un aprendizaje conjunto de sistemas y procesos, por ejemplo. En este proceso, fuimos utilizando los mismos sistemas de gestión, debido a la necesidad. Pasamos a tener un programa de gestión textil, en el cual las unidades operan el control de la producción. Entonces, todos comenzamos a hablar una única lengua dentro de un sistema de gestión. Portuñol, portugués o español, da igual… Hoy parece sencillo pero en aquella época fue un gran logro de áreas como TI y Operaciones el poder integrar los ambientes. Después, esta conexión fue extendida a otras áreas, como la Contable, Financiera, Compras, Pagos, que poseen aplicaciones padrones. Esto permite consolidar una única Vicunha.

“Vicunha está preparada para atender a toda América y eso era imposible de pensar cuando yo estaba en la pequeña empresa textil. Hoy, pensamos en una Vicunha global, con una operación en la Europa consolidada”.

¿Cuál es el papel de Vicunha hoy en la industria de Ecuador?

Somos la mayor industria textil del país y somos una empresa grande, pues el sector textil aquí es pequeño. Ecuador no es un país industrial sino agroindustrial, y con posibilidades turísticas. Somos el mayor exportador de bananas del mundo, de camarón, atún, y tenemos el cacao y el café más valiosos del mundo. Atendemos el mercado local con productos ecuatorianos y brasileños, que forman una cesta que es atractiva para la confección. Y también atendemos países como Colombia, Perú y de América Central, por ejemplo.

¿Cuáles son los desafíos y oportunidades de actuar localmente?

Ecuador no tiene una moneda propia. Nuestra moneda es el dólar desde los años 2000. Por lo que el costo de producción es más caro y eso complica nuestras operaciones, pues exportar se vuelve más caro. Eso significa que nuestra eficiencia, sostenibilidad y calidad marcan la diferencia al exportar, pues hacen que nuestros productos sean más atractivos.

¿Cuál es la integración con Brasil actualmente?

Tenemos un contacto directo con Brasil. Somos una única Vicunha, no hay dos. Eso es importante y ha sido un esfuerzo de nuestros líderes pensar siempre de forma unificada. Si necesitamos alguna ayuda en mantenimiento, por ejemplo, llamamos a las unidades brasileñas y conseguimos apoyo.

“Somos parte de una única familia… Si vienes a Vicunha Ecuador, te vas a sentir en casa”

¿De cuál logro en estos 34 años de empresa se enorgullece más?

Mi sueño era cumplir 100 años de la empresa La Internacional, y tuve la oportunidad de completar esta marca recientemente. Y otro hecho que me llena de orgullo es ser parte de los 55 años de Vicunha, sabiendo que estamos juntos desde los últimos 15. Somos parte de una única familia.