El pasado miércoles 2 se celebro el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, también conocido como Trastorno del Espectro Autista (TEA)

En Vicunha, creemos que la diversidad y la inclusión son fundamentales para un entorno más acogedor e innovador. Por eso, en Abril Azul, el mes de concienciación sobre el Trastorno del Espectro Autista (TEA), invitamos a todos a comprender mejor este trastorno y a reflexionar sobre cómo podemos promover un espacio más inclusivo para las personas con autismo.

Entendiendo el Trastorno del Espectro Autista (TEA)

El autismo es una condición neurológica que afecta la forma en que una persona se comunica, interactúa socialmente y percibe el mundo que la rodea. Se le llama “espectro” porque abarca una gran variedad de características y niveles de apoyo necesarios, lo que significa que cada persona con autismo es única, con habilidades y desafíos propios. Por esta razón, el autismo es considerado una discapacidad invisible, ya que no presenta características visibles a simple vista.

Muchas personas con TEA que requieren bajo nivel de apoyo o con autismo leve (que no muestran los estereotipos del trastorno) suelen ser invisibilizadas, escuchando frases como “Ni siquiera pareces autista” o “Solo necesitas esforzarte más”. Estas declaraciones refuerzan estereotipos y prejuicios, ya que parten de la idea errónea de que la persona es incapaz, generando barreras, distanciamiento e invalidando sus dificultades.

A pesar de los avances, todavía existe mucha desinformación sobre el autismo, lo que puede representar desafíos para quienes viven con esta condición. En el ámbito laboral, esta realidad también se refleja, haciendo de la inclusión un aspecto clave a abordar.

Comprender el autismo es un paso fundamental hacia la inclusión. No existe un “perfil único” de persona autista. Cuando nos abrimos a esta comprensión, dejamos de ver solo desafíos y comenzamos a reconocer talentos y potenciales.

¡Pequeños gestos, grandes impactos!

Incluir es más sencillo de lo que parece. Algunas acciones cotidianas pueden hacer que el entorno sea más accesible para las personas autistas, como:

Respetar diferentes formas de comunicación – algunas personas autistas pueden tener dificultades con la comunicación verbal, entender expresiones indirectas, expresar sus pensamientos y sentimientos o mantener contacto visual. Usa una comunicación clara y directa.

Comprender sensibilidades sensoriales – ruidos fuertes, luces intensas o entornos muy agitados pueden resultar incómodos para algunas personas.

Evitar juicios – cada persona tiene su propia manera de interactuar y aprender. Lo más importante es brindar apoyo y acogida.

Es esencial que esta perspectiva empática esté presente en todos los ámbitos: en las escuelas, los espacios de trabajo e incluso en las interacciones cotidianas.

¡Construyamos juntos un mundo donde todas las personas sean respetadas y valoradas por quienes son! 💙

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